No es ansiedad, sino CULPA

La ansiedad puede definirse como una anticipación de un daño o desgracia futuros, acompañada de un sentimiento de disforia (desagradable) y/o de síntomas somáticos de tensión. El objetivo del daño anticipado puede ser interno o externo. Es una señal de alerta que advierte sobre un peligro inminente y permite a la persona que adopte las medidas necesarias para enfrentarse a una amenaza.
Esta es una de las definiciones de la ansiedad que normalmente viene asociada a un estado de ánimo decaído. Donde la persona siente una pérdida de ilusión y entusiasmo por las actividades cotidianas….
La ansiedad normalmente se asocia a una situación futura y el estado de ánimo decaído se asocia a una situación pasada. Aunque la mayoría de las veces se entremezclan en un mismo espacio temporal, el presente. Haciendo que éste difícilmente pueda ser gestionado.
Seguramente hayas leído muchas veces “deja atrás el pasado, mira hacia el futuro”… pero cómo hacerlo si ambos espacios se perciben como peligrosos, como situaciones difíciles de abordar… si la mirada siempre es la misma….
Si ahondamos un poco más en la percepción que tenemos del “Ahora”, descubriremos cuál es el mecanismo que subyace a esa sensación que muchas veces cuesta tanto gestionar…. Y es que todo es una cadena de percepciones que se han ido tejiendo hasta traerte a este momento. Una cadena que te dibujan esta realidad.
Cuando sentimos ansiedad, es porque el enfoque que estamos teniendo de nuestra situación actual no es correcto, está sesgado por nuestra experiencias e historia pasada. Si profundizamos un poco, lo que determina que usemos ese enfoque y que miremos la realidad desde ahí, se debe a una sola razón, La CULPA.
Culpa por no haber cumplido las expectativas que tenías sobre lo que creías que tenías que haber hecho y/o conseguido y no has conseguido.
Culpa por estar donde estás y no donde crees que deberías estar.
Culpa por no cumplir con las responsabilidades del trabajo como se esperaba de ti.
Culpa por no haber satisfecho las necesidades de la familia, pareja o amigos.
Culpa por no cumplir con tus hij@s....
Culpa por no haber tomado decisiones para agradar a los demás, poniendo su opinión por encima de la tuya…
Culpa por haber tomado decisiones cuyos resultados no eran los esperados…
Culpa por………..
Y toda esta culpa se queda anclada y guardada dentro, tocando y deteriorando cada una de las áreas de la vida, haciendo que cada despertar tenga un sabor cada vez más amargo y un color cada vez más opaco….
La culpa es un virus que la mente crea por una educación socio-cultural mediocre y pobre. Este virus mental, es capaz de exterminar por completo la chispa y la ilusión de cualquier persona dejándola sin aliento y sin vida.
La mayoría de las veces no somos conscientes de que lo que crea toda esta sintomatología está sostenida por la culpa, y ésta a su vez está generada por creencias insostenibles sobre una realidad que se creó y que nunca fue y que nunca será….
Existen muchas formas de identificar sus manifestaciones y muchas formas de acabar con este virus… pero para ello hay que detectarlo, diagnosticarlo ver sus orígenes y sus metástasis…
Hay muchas formaciones, talleres, cursos, terapeutas, gurús etc…. Que te dicen que es fácil cambiar la visión, el enfoque, la acción, la mentalidad, que puedes hacerlo tú sin ayuda… No te voy a engañar. Yo te hablo desde la experiencia, No es fácil. Si fuese fácil todo el mundo iría por la calle con los ojos brillantes y llenos de ilusión. Y esa no es la realidad….
Lo que determina que sea fácil es la experiencia, por eso hay personas que saben dónde tocar. Si no, no habría médicos estudiando sin parar, y personas dedicando su vida para mejorar sus intervenciones y la calidad de vida de las personas que se ponen en sus manos… Y es que tocar el corazón de alguien no es fácil, pero es hermoso escuchar la música de su latido.
Quiero compartir contigo mi experiencia, quiero mostrarte que sí se puede, pero que no todo lo que te venden es lo que necesitas. Tampoco sé si lo que necesitas es lo que yo voy a ofrecerte, pero eso es algo que debes determinar tú.
Por eso te invito a que asistas a mi webinar donde te explicaré uno de los mecanismos de la culpa, cómo se crea, cómo poder detectarla y cómo puedes ir deshaciéndola para que te permita, al menos pararte y desconfigurar esa parte de ti.
Quiero que entiendas que no tienes por qué seguir sosteniendo un estado que empeora con el paso del tiempo,
Quiero que sepas que tienes derecho a vivir desde otro lugar,
Quiero que veas a través de unos ojos diferentes, los tuyos, pero con una luz diferente.
Y tú ¿quieres?...
“La Culpa es el filtro que empaña todo tu ayer, difumina tu mañana e impregna tu HOY.”